jueves, 23 de enero de 2014

Conociéndote 16



-¿Marco? – preguntó ella a su vez y al recordar lo que tenía en la mano imaginó lo que su hermano estaba pensando.
-Salgamos..-dijo simplemente él  y salió de la farmacia esperando que ellos lo siguieran.
-¿Estas embarazada? – preguntó tan pronto estuvieron en la puerta
-¡Claro que no! – gritó ella
-¡Es una tarea de la escuela!- dijo Ben a su vez y la mirada del hermano se posó sobre él.

-Tú…¿cómo te llamas? – dijo con brusquedad apuntando a Benedict con el dedo
-Marco, no hagas esto, no es lo que crees. Es mi compañero de clase y esto era parte de un proyecto que debemos presentar…
-Soy Benedict Cole – intervino el chico interrumpiéndola
-Vete a casa Lena, y quiero hablar con tu “compañero”
-Sí, ve…- insistió ben.
-Pero..
-Quiero hablarle Helena, sólo eso. Vete a casa.
-Estaré bien – dijo Ben.
-Vamos a allá, hay una a cafetería donde podemos hablar – dijo e indicó hacia la esquina de la otra cuadra.
-¿Sólo vas a hablar con él, verdad? – preguntó Helena a su hermano mayor.
- Ya dije que sí, vete a casa que luego también hablaré contigo.
-Marco Wilde, como hagas algo….
-Vete, es tarde y papa debe estar esperándote para cenar .Tú, ven conmigo – dijo y salió caminando en dirección a la cafetería.
Helena protestó , pero los dejó ir,  su hermano sólo estaba intentando protegerla  a su manera torpe, y Ben…ella confiaba en él, se las arreglaría bien.
Los dos hombres llegaron a la cafetería, Marco hizo una seña a la mesera y pidió dos cafés, una vez que les sirvieron se sentaron frente a frente.
-Explica – dijo Marco dando un trago y Benedict le explicó sobre el trabajo que estaban haciendo y como todo había sido un gran malentendido
Una vez que terminó de explicar, Marco lo miró fijamente y lanzó su próxima pregunta..
-¿Qué quieres con ella? Mi hermana no es alguien con quien puedas jugar, ya su vida es bastante difícil como para que algún imbécil se la arruine más. – dijo y la mirada de Benedict cambió, se endureció.
-No lo sé, en la escuela dicen que sale con tipos de los bares – contestó Ben y Marco se estiró sobre la mesa y lo agarró por la camisa con una clara intención de asesinarlo.
-Mi hermana… – masculló mientras lo sostenía con fuerza y Benedict siguió hablándolo mirándolo con el mismo tipo de mirada asesina.
-Ella tiene que soportarlo por tu culpa, por las veces que va a buscarte borracho a los bares, es probable que alguien la haya visto salir contigo así como los vi yo el día que la ayudé a llevarte a casa. Si de verdad te preocupas por Helena, deja de beber…-le dijo con dureza y el hombre lo soltó y medio sonrió mirándolo diferente, como si lo evaluara.
-¿Entonces ella te importa de verdad?
-Sí – contestó simplemente Benedict.
-Repetiré mi pregunta que quieres de ella…
-Ser su amigo, alguien en quien pueda confiar. Helena no confía en nadie, ni pide ayuda.
-¿Sólo eso?
-Estoy enamorado de ella, así que…
-¿Mi hermana lo sabe?
-No, me ha costado mucho llegar a donde estamos, no quiero espantarla.
-¿Eres alguien que puede protegerla?
-Ella sabe karate. – respondió en broma tratando de aligerar el peso de lo que acababa de confesar. Era la primera vez que decía en voz alta lo que sentía por Helena.
-No hablo de eso, niño listo, sabes a qué me refiero…en la escuela, lo que se dice de ella, toda la porquería…¿puedes cuidarla? ¿ o estar a tu lado lo empeorará todo para ella?
-Sí, puedo cuidarla y  quiero hacerlo.
-¿Eres un buen estudiante o un bueno para nada?
-Soy el delegado de la clase – respondió él - con el mejor promedio.
-Ella ha tenido una vida difícil y es en serio,
-Lo sé.
-¿Qué tanto sabes? – pregunto el hombre mirándolo extrañado.
-Lo sé todo, ella me lo contó.
-Vaya, eso es raro, pero como sabes mi madre, su mejor amiga e incluso nosotros le hemos dado momentos duros,  ninguno de nosotros ha ayudado a facilitarle nada, aunque la queremos le complicamos la vida…no necesita a nadie más así en su vida.
-No voy a complicarle la vida, quiero que ella esté bien.
-De acuerdo, pero si lo arruinas te mato. Si lastimas a mi hermana, si la veo llorar por tu culpa…iré por ti.
--¿Dejarás de beber? Lo dijiste,  ella ya tiene demasiado sin toda esa basura.
-Sí voy a intentarlo…así que cuídala, te confío a mi hermanita, y mantén tus manos alejadas, si la embarazas, te hago puré.- le dijo finalmente y Ben se sonrojó.
-Yo…-titubeó y el hermano de Lena sonrió plenamente divertido por la reacción del chico.
-Está bien chico, me caes bien. Ahora vete a casa, es tarde- dijo y Ben se puso de pie.
-De acuerdo, pero tú también te vas. No vas a beber hoy.
-Sí, creo que de verdad me gustas – dijo el hermano de Lena, dejó unos billetes sobre la mesa y salió junto a Ben dándole una palmaditas en la espalda.
Al salir, estaba en la vereda de enfrente, esperándolos aún.
-¿Qué haces aquí? Te dije que fueras a casa…- dijo Marco al verla.
-¿No le hiciste nada, verdad?- preguntó ansiosa
-Tu amigo está perfectamente bien – dijo él y remarcó la palabra amigo aunque Lena no lo notó, Ben sí.
-Nos vemos mañana…- dijo Lena a Benedict y su hermano se giró.
-Oye chico, acompaña a mi hermana a mi casa…tengo algo que hacer.
-¿ Dónde vas? – preguntó Lena preocupada.
-A la farmacia, ¿recuerdas? Iba a comprar algo cuando me sobresaltó la posibilidad de ser tío…
-¡MARCO! – chilló ella poniéndose colorada
- Nos vemos, Lena. No te preocupes, me portaré bien- dijo guiñándole un ojo y luego se marchó dejándolos solos.
-Lo siento….-dijo ella avergonzada mientras caminaban hacia la casa. Ben siempre veía lo peor de ella y de su vida, no le gustaba eso.
-Está bien, él sólo estaba preocupado por ti. Sólo hablamos.
-Demoraron mucho – dijo ella.
- Teníamos cosas de qué hablar.
-¿Cosas?
-Sí, tenemos algunos intereses en común – respondió evasivo.
-¿Se puede saber qué intereses tienes en común con mi hermano, delegado?
-No, cosas de hombres – dijo él y ella agitó la cabeza.
-Es aquí , gracias por acompañarme…supongo– dijo Lena deteniéndose frente a la puerta de su casa y recordando que él había sido medo forzado por su hermano.
. Fue un placer, y ¿sabes algo? Hace tiempo me pregunté cuándo podría ser capaz de hacer esto…
-¿Hacer qué?
-Acompañarte hasta la puerta de tu casa.
-No es algo tan raro…quiero decir…- medio titubeó ella pensando que sí era raro, algo tan común y tan extraordinario como caminar junto a un chico hasta su casa, caminar sin sentirse incómoda o preocupada, sin tener que levantar escudos para ocultarse.
- Nos vemos mañana – dijo él viendo que estaba algo confundida.
- Sí, hasta mañana….Benedict.
-¿Sí?
-Gracias.
-¿Por acompañarte?
-Por todo – dijo ella y le sonrió.












6 comentarios:

  1. Lo dijo!!!
    La ama, la ama... aich... que lindo capitulo. Y ella, comienza a estar algo agusto en su compañía. Que vio tarde,lo de que le acompañara a casa no era normal.

    Mujeres

    Quiero más, besos Bolívar rojo

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  2. Aaaaay Ben lo confesó!! Me gustó mucho este capítulo, casi pensé que Marco no permitiría que Ben le explicara nada jaja. Pobre Lena tan preocupada y bueeee, al final todo salió bien.
    Ahora, a esperar el siguiente paso de Ben.
    Abrazos y gracias Nata!!

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  3. cuando el dijo hace tiempo queria hacer esto" pense que la besaria, pero no... y mejor así, mejor lento y seguro que Lena es un caso mas complicado. gracias me encanta esta historia. ya quiero mas de esta y de las demás que aun no estan terminadas... pero tengo paciencia asi que no crean que las estoy apurando.

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  4. Que lindo capítulo. Me encanto la timidez de él al confesar que la amaba.
    ¡¡Que bonito!!
    Como siempre, Nata, esperando más.
    Muchos besos.

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  5. No te olvides de esta historia, muero por un capi mas!...un beso grande, y gracias por alegrarnos con tus historias

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