En mi país, hoy se celebra el día del amigo, así que quise dejar mi saludo y hablar un poco de ese regalo que son las amigas…
La amistad femenina, terreno tan misterioso para el hombre, tiene mucho de hermandad, cuando hacemos verdaderas amigas, forjamos lazos que enriquecen nuestra vida para siempre.
Y allí están las personas que nos acompañan al baño en las salidas, que se preocupan por nuestra apariencia y salud , más que nosotras mismas, las amigas son quienes lloran con nosotras y ríen nuestra risa.
Con las que podemos hablar de todo o de nada, porque incluso en el silencio estamos cómodas y porque además adivinan lo que pensamos y decimos.
Tu amiga es esa que reconoce por tu tono de voz que algo anda mal y no para hasta averiguar qué es o , contradictoriamente, espera en silencio a que puedas decirlo…con la secreta convicción de que sabrás que está allí para ti, cuando llegue el momento.
Las amigas son las que pelean las batallas por ti, mejor de lo que podrías hacerlo, insultan al que te rompió el corazón, maldicen al jefe que te da problemas o preguntan simplemente “¿A quién le pego?” para hacerte reír y olvidar los problemas.
Las amigas a veces son más familia que la propia familia, porque saben cosas que nadie más sabe, porque no tienen expectativas sobre lo que debes ser, para ellas basta con ser tú misma, porque conocen tus defectos y, aunque los padecen y protestan , te aceptan con ellos.
A las amigas puedes recibirlas usando un viejo piyama y estando despeinada, puedes hablar horas por teléfono o por chat sin darte cuenta. Y los temas van desde la comida, la ropa hasta la economía mundial, las teorías científicas y el mayor misterio del Universo: Los hombres.
Hacen planes locos para animarte y te acompañan cuando caes, están allí para levantarte y decirte que sigas.
Y aunque a veces digan te lo dije, sabes que estarán allí aunque cometas el mismo error.
Con ellas compartes cafés, salidas, chocolates, con ellas compartes lo mejor y lo peor de ti misma.
Tener amigas es pensar en ellas cuando no están, y reírte sola en la calle imaginando como reaccionarían ante tal situación, es saber exactamente qué consejo te darían y el tono de voz que usarían. Es ver algo en una vidriera y pensar en ellas inmediatamente.
Las amigas no son las que leen la historia de tu vida, la escriben contigo, están a tu lado.
A veces se enojan, pero saben que es pasajero, pueden decirte lo que no quieres escuchar porque también son las que sacan a la luz lo mejor de ti.
Son un poco hadas madrinas, un poco psicólogas, un poco caballero andante, un poco médico, un poco de todos lo que necesites.
Y cuando estás sola, triste, creyendo que el mundo se cae a pedazos, son la luz que no deja perder la fe, y hacen milagros con algo tan simple como un gesto, un abrazo o una palabra a tiempo.
Porque son de lo mejor que tengo en mi vida, en este día saludo a mis amigas queridas y muy particularmente a mis sis, compañeras de aventuras ( ejem, locura, también) y hermanas que me regaló la vida. ¡ Gracias por ello!
¡Las quiero!
No hay comentarios:
Publicar un comentario