- Las dos
realmente, porque pronto será una realidad la segunda también ¿no?
- ¿Lo dices
en verdad? –Nick sonrió ampliamente- te amo, Emma.
- Y yo te
amo, Nick –contestó Emma emocionada- y claro que lo digo en serio. No hay nada
que desee más que casarme contigo.
- No pensé
que llegaría a escuchar esas palabras de ti o que se me llenaría el corazón de
tanta alegría por eso… soy tan feliz.
- No más
que yo –sonrió Emma- quiero verte. Estoy deseando verte, Nick.
- Esta
noche. Sal conmigo, Emma.
- Pero
Nick, si alguien nos ve y…
- Será una
noche que no olvidarás. No te arrepentirás.
- Yo…
-suspiró por lo bajo- ¿cómo podría negarme con semejante declaración?
- Pasaré
por ti a las 9. No me vayas a fallar.
- Imposible
–susurró Emma- adiós Nick.
- Hasta más
tarde, Emma –se despidió y colgó.
Nick giró y
se encontró con sus 3 “hermanos” charlando muy cerca de él. Demasiado cerca.
Puso en blanco los ojos.
- ¿De
verdad Nick? “Una noche que no olvidarás” –se burló imitándolo Derek y contuvo
una carcajada- ¿eso funciona?
- No seas
malo con él –reprendió Donovan sonriendo levemente- está enamorado.
- ¡Sabía
que había algo diferente en ti! –Lucian habló- ¿quién es? ¿la conocemos?
- Claro que
la conocemos –Derek entrecerró los ojos- ¿verdad que la conocemos?
- Sí, la
conocemos. Seguro que la conocemos –dijo pensativo Donovan.
- Bueno,
ustedes… -empezó Nick.
- ¿Quién
es? ¿Hace cuánto salen? ¿Realmente te vas a casar? –soltó sorprendido Lucian-
¿Nick?
- Y me
pregunto por qué no les dije nada… -bufó Nick- claro que la conocen. Al menos
tú seguro la recuerdas –señaló a Lucian- es Emma.
Intercambiaron
una mirada de confusión entre ellos y fue Derek quien elevó sus ojos castaños
con sorpresa.
- ¿No era
ese el nombre de la chica de la boda? –Derek no esperó la confirmación- ¿el
lugar en que te recogí el fin de semana?
- ¿Cuál fin
de semana? –Donovan interrogó a Derek- ¿qué no están diciendo? ¿Cuál boda? Me
siento totalmente perdido.
- Del fin
de semana no tengo la menor idea –habló Lucian- pero creo que la boda… ¿la de
Marcos en Italia, cierto?
- ¡Exacto!
–declaró Derek- ¿cómo supiste…? Bueno, no interesa. Lo cierto es que lo supe
desde los vi. ¡Debían verlos discutiendo porque Nick la besó y ella lo golpeó!
- ¿Qué?
–exclamaron al unísono Donovan y Lucian- ¿qué exactamente sucedió?
- No, lo
interesante es… ¿cómo pasaron de eso a querer casarse? –dijo Derek.
- No es tan
difícil imaginarlo… -reflexionó Lucian.
- ¿Si se
conocieron en Italia cómo es que ella está aquí? ¿O cuándo fuiste tú a Italia?
–preguntó Donovan intrigado.
- ¿Saben
que todos se están comportando como si realmente fueran mis hermanos mayores?
–resopló Nick y los 3 lo miraron indignados- está bien, son mis hermanos
mayores pero… ¡saben a lo que me refiero! –se quejó.
- Es que no
lo entendemos y ni siquiera sabíamos que… ¡hasta hace un par de meses dijiste
que estabas soltero! –expuso Lucian.
- Sí,
bueno… -exhaló con cansancio- ni siquiera lo noté. Pensé que con Emma me unía
solo una gran amistad pero… bien, cuando me di cuenta, ya estaba completamente
enamorado de ella ¿sí? No hubo mucho que yo pudiera hacer para evitar que
sucediera y… ¡y lo cierto es que quiero casarme con ella ya!
- ¿Ya? ¿Por
qué la prisa? –Derek ladeó el rostro- ¿alguna razón en particular?
- ¡Nada de
lo que supones! –Nick gruñó hacia Derek, que aún mantenía el gesto pícaro-
simplemente que no quiero perderla. La amo y la quiero a mi lado.
- Pero
casarte… -Lucian dijo inseguro.
- Es un
gran paso, Nick –concretó Donovan.
- Eso ya lo
sé, pero no veo por qué esperar. Y tú –giró hacia Derek- no deberías decir ni
una palabra al respecto.
- Sacar a
relucir eso no fue muy leal de tu parte –Derek espetó indignado.
- Me da
igual. La amo y me casaré con ella, mientras más pronto, mejor.
- Siendo así
y si estás seguro, yo me siento muy feliz por ti –se encogió de hombros Lucian-
ya era hora de que empezaras a sentar cabeza.
- Sí,
quizás Lucian tiene razón –confirmó Donovan- y sea una mujer con sentido común
lo que necesites en tu vida. ¿Por qué es alguien así verdad? –los miró uno a
uno.
- Sí que lo
es –confirmó Lucian.
- Aparte de
pelear con Nick, creo que es bastante sensata –soltó pensativo Derek.
Nick puso
en blanco los ojos pero se dejó abrazar y felicitar por sus “hermanos”. Les
contó a breves rasgos cómo había sucedido todo antes de volver a la entrevista.
***
Emma
inspiró hondo y cerró los ojos por un instante. Los abrió y las luces de la
ciudad lucían parpadeantes y cercanas a ella, como si el cielo estrellado se
reflejara a los pies de la casa. Sonrió levemente al sentir la llegada de Nick.
- ¿Está
todo bien amor? –susurró Nick pasando sus brazos por la cintura de Emma- de un
momento a otro, desapareciste.
- Mmm… es
que me encanta la vista desde aquí –apoyó la cabeza en el pecho de Nick- es
maravillosa tu casa.
- ¿Si?
–murmuró Nick besando lentamente la mejilla de Emma hasta llegar a su cuello.
Ella suspiró.
- Sí. Me
siento muy feliz aquí, contigo –echó la cabeza a un lado para que Nick no se
detuviera- quisiera que esta noche no terminara.
- Ya somos
dos los que deseamos eso. ¿Te ha gustado la cena?
- ¡Sí, amé
cenar en privado! Una gran idea no salir de casa –Emma habló con entusiasmo- y
la culminación de la cena… fue maravilloso.
- Por un
momento temí que me dijeras que no –Nick elevó la cabeza y enterró su rostro en
el cabello de Emma- me alegro de que estuviera equivocado.
- ¿No? Eso
no es posible, Nick. No te imaginas cuánto te amo…
- Me hago
una idea porque yo también te amo y a cada instante…
- ¿A cada
instante? –inquirió Emma.
- No lo sé…
he perdido la idea de lo que estaba diciendo –rió Nick.
- Nick
–llamó Emma y giró para mirarlo de frente- ¿te importaría mostrarme el resto de
tu casa? –pidió y un suave sonrojo cubrió sus mejillas- ¿vamos?
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