Chico Malo, Chico Bueno...novelas y vida

Me pregunto por qué en las novelas me atraen los chicos malos, cuando en la vida real soy defensora del buen amor, y sobre todo de eso de que a las mujeres no se nos agrede ni con el pétalo de una flor. Bue, dado que la lista de mis chicos malos se amplía voy a tener que analizarlo...

Cuando leo novelas la mayoría de mis héroes favoritos son algo arrogantes ,por nodecir mucho, pasa con los chicos de Lynn Graham y Sara Craven ( esos griegos y príncipes árabes insoportablemente mandones), con los medievales de Jude Devereaux , con los compañeros de las floreros de Kleypas, entre otros.

También los clásicos, Mr Darcy y Heatcliff me hacen suspirar con su mezcla de arrogancia y tormento.

Y, ¡oh sorpresa!,  también pasa con los protagonistas de mis últimos doramas favoritos Best Love, Secret Garden, YAB.  Porque sin dudas me gustan los muy desgraciados, me late el corazón cuando agarran a la chica de la mano y la arrastran consigo, cuando  tienen ataques de celos y se  enfrentan a otro hombre por eso ¡MEJOR!. Y sus ataques de egocentrismo o malhumor terminan enterneciéndome.

Y sí también me gustan en las películas...allí está el ejemplo de mi chico de la foto, el Sr. Deep.

¿Estoy volviéndome masoquista?

Porque eso es lo más extraño de todo, mi pensamiento es totalmente contrario a estos personajes, es decir me encantan en la ficción, pero los aborrecería en la vida real.

Soy una convencida de que el amor debe ser BUEN AMOR, causar felicidad y nunca hacernos sufrir. Sino no vale la pena.

No toleraría el maltrato ni los celos, mucho menos a alguien que se crea dueño y señor de mi destino, que tantos años de mujer moderna no han sido en vano.

Me gustan los hombres caballeros, dulces y atentos. Creo que en ese sentido las mujeres somos fáciles ( perdón, hablaré de mi, no hay que andar generalizando) ..quiero decir que soy fácil de enamorar ( muchachos, tomen nota) , creo que la fórmula es tal como reza la canción “prometo amar al primero que no me haga daño”, así de simple.

Un buen hombre, eso es todo lo que pido.

Que me ofrezca una silla si estoy cansada, un abrigo si tengo frío, una bebida si tengo sed, un abrazo si estoy herida.

¿ENTONCES? ¿Por qué me gustan los chicos malos en la ficción?

Creo que sé la respuesta, porque sabemos que en el fondo no son malos, que caerán rendidos ante la chica en cuestión, que son capaces de arriesgar su vida por ella, recibirán la estocada de una espada en su lugar de ser necesario, la protegerán aún cuando fingen no hacerlo y la amarán con una intensidad comparable a su apasionado carácter.

Sabemos que no resultarán en un psicópata homicida, y que la historia no acabará en una denuncia por maltrato o en un crimen pasional.

Sabemos que nuestros héroes sólo tienen fachada de chicos malos pero no lo son realmente y que el cuento terminará feliz.

Por eso nos gustan, al menos a mí,  y también por eso no me gustan en la vida real los chicos malos.

Así que seguiré deleitándome con estas historias mientras espero que algún caballero de la realidad sepa que basta con tratarme bien para conquistar mi corazón.

 Y después dicen que somos exigentes....