miércoles, 25 de julio de 2012

Una canción para ti...11°


El segundo día, al salir del trabajo, Emma se encontró a Leandro esperándola, Tristán había tenido un trabajo de medio tiempo. Y al día siguiente la buscó Cameron, así día a día, los chicos fueron turnándose para ir a buscarla a la salida de la cafetería.
Aunque la chica protestó, le hicieron caso omiso.
-¿Dónde vamos? – preguntó Emma a Dani, su guardián de aquella noche, habían tomado un autobús diferente al usual.
-A la sala de ensayos…
-¿Hay ensayo, a esta hora?- preguntó ella extrañada de que fueran al depósito.
-Sip, es que los chicos estuvieron ocupados al mediodía…sino lo hubiéramos hecho durante el almuerzo…- dijo él y luego siguió callado durante todo el viaje.
-Entra primero ...- dijo Dani cuando llegaron al depósito y Emma asintió aunque algo extrañada, el chico estaba raro, como nervioso.
Entró y entonces se dio cuenta que sucedía.
“¡Qué los cumplas feliz, qué los cumplas feliz, querida Emma que los cumplas feliz!” entonaron los chicos de Escudo Azul al verla entrar.

-¡Feliz cumpleaños! – le dijo Dani poniéndose a su lado y los demás se acercaron a saludarla.
- Queríamos darte una sorpresa – explicó Cameron y vaya si lo habían logrado, le costaba mucho contener las lágrimas de la emoción.
-Feliz cumpleaños, Emma – dijo Tristan que cargaba un pastel con una vela.
-Pide tres deseos y sopla...-dijo Luc y ella asintió. Cerró los ojos por unos segundos y luego con todas sus fuerzas sopló la vela mientras sus amigos aplaudían.
Después se sentaron en el suelo para comer y celebrar.
-Tu regalo – dijo Leandro y le alcanzó un paquetito.
-Hicimos que Cameron lo eligiera, es el que tiene mejor gusto para estas cosas – aclaró Bim mientras la chica rompía la envoltura. Dentro había un pequeño estuche y en su interior una cadenita con un dije de una clave de sol, era muy delicado y muy bello.
-¡Gracias!
-¿Te gusta? – preguntó Tristán ansioso
-Me encanta – respondió ella y esta vez no pudo evitar que se le escaparan un par de lágrimas.
-Emma, no llores....- dijo Leandro incómodo.
-¡Oh, pero es que soy muy feliz! Gracias, gracias en serio, hace años que no festejo mi cumpleaños, y el regalo es precioso- explicó ella.
-Lo celebraremos siempre de ahora en más – declaró Bim y los demás empezaron a gastarle bromas.
-¡Para ti cualquier excusa es buena!- bromeó Luc.
-Ya eres mayor, ahora puedes enfrentarte a tu padrastro y recuperar lo que es tuyo…-dijo Dani y la chica bajó la mirada.
-No quiero pensar en eso ahora…-contestó titubeante y tanto Cam como Tristan se la quedaron mirando.
Siguieron el festejo  un rato más y cuando se hizo muy tarde partieron , porque varios tenían obligaciones al día siguiente.
-Nos vemos mañana…-se despidió Leandro.
-¿No vienes a la casa? – preguntó Emma.
-No, conseguí un trabajo ayudando a descargar un envió que llega hoy a la importadora donde trabajo a veces.
-¿Nada ilegal, verdad? – preguntó en broma Tristán.
- No, nada ilegal, pero maldita la hora que eligen para la llegada de los cargamentos.
-Hasta mañana, entonces, cuídate..-saludó Emma y él le guiñó el ojo. Luego Tristán y la chica siguieron su camino hacia la casa. Caminaron en silencio y cuando llegaron a la puerta, él soltó lo que había estado rumiando durante todo el camino.
-¿Qué hiciste Emma? ¿Qué hiciste a cambio de que tu padrastro nos soltara a Leandro y a mí?
-Yo…sólo le di lo que quería.
-Dime que no le diste el dinero de tu madre, dime que puedes revertirlo…- insistió enojado.
-Ya no importa Tristán, era la única salida, es sólo dinero.
-¡¿Compraste mi libertad con lo que te dejó tu madre?!- preguntó él frustrado.
-No, compré mi libertad – contestó ella con una sonrisa triste mientras acariciaba la cadenita con la clave de sol que llevaba en el cuello.
-Emma…
-Prefiero esta vida, soy más feliz ahora. Antes el único momento en que me sentía así era en la terraza, ahora es como si esa terraza se hubiera extendido infinitamente y siempre estuviera allí, siempre bajo el cielo azul….como si por fin perteneciera a algún lugar. Si eso fue el precio, era sólo dinero, era muy poco.-explicó ella y él sonrió muy levemente.
-Creo que has cumplido más que dieciocho, creces muy rápido compositora, nos dejarás atrás muy pronto.
-Espero que no, espero poder seguir a su lado, .son lo único que tengo.
-Somos tu familia, aquí estaremos- dijo Tristán y Emma supo que por ahora ese era su mejor regalo de cumpleaños.

Escudo Azul se presentó en la radio y a partir de eso les llegaron muchas ofertas para presentaciones que fueron aumentando su popularidad
Con su mayoría de edad recién adquirida, Emma aprovechó para seguirlos y ver sus presentaciones donde fuera. Ya no necesitaba permiso apara ingresar y además se sentía más segura de sí misma, poco a poco iba cambiando.
Los fans del grupo iban en aumento , así que aquella noche había mucha gente rodeando el escenario, Emma se quedó algo alejada, apoyada en una columna, los vio salir al escenario y en breve la música comenzó a llenar todo el lugar, después la voz de Tristan entonó la nueva canción que había compuesto junto a ella. Era extraño, conocía aquellas palabras pues las había escrito, pero cuando él las cantaba se transformaban en algo más.

Temo dormirme
Volver al insensible frío
Al mundo desierto
A una piel que no es mía
Temo estar dormido

Abrir los ojos no  siempre es despertar
Quiero permanecer en esta realidad
Despertar y que el mundo esté latiendo

Mírame desde más allá del sueño
Llámame para que no duerma
Quiero estar despierto
Y latir y latir con los ojos abiertos
Ser alba palpitando

Quiero estar despierto y latir latir
Con un corazón que no queme, latir latir

Abrir los ojos no siempre es despertar
Pero si me miras, yo despierto


Cuando terminaron de cantar los oyentes explotaron con aplausos pidiendo más, Escudo Azul cantó un par más de canciones y luego se despidieron. Emma intentó acercarse pero había mucha gente y no pudo llegar hasta ellos, un rato después Cameron se le acercó.
-¿Qué tal estuvimos?- preguntó
-¡Geniales! Es…hipnotizante.
-Son las canciones, tenemos una gran compositora, ¿nadie te molestó, verdad?- preguntó preocupado.
-No, nadie, estaban muy entretenidos escuchándolos y además suelo ser invisible, ¿recuerdas? – preguntó ella y él la miro de una forma indescifrable.
-Vamos …
-¿Y los chicos? ¿ Ya terminaron con los autógrafos? – preguntó en broma.
-Están afuera, sólo nos falta Tris. Vamos a buscarlo- dijo Cam y  la agarró de los hombros para poder ayudarla a pasar entre la gente.
Buscaron pero no lo veían por ninguna parte.
-Tal vez esté detrás del escenario…-sugirió Emma y se dirigieron hacia allí. Apenas entraron en el estrecho pasillo, lo vieron, estaba besándose muy apasionadamente con una chica. Emma quedó estática sin saber qué hacer, de pronto la mano de Cameron le cubrió los ojos.
-Vámonos – dijo el chico y la sacó de allí.
-Tristan no terminó con los autógrafos aún, ¿verdad? – dijo ella intentando bromear pero estaba pálida.
Eso parece – dijo Cam y la arrastró afuera donde estaban los demás esperando en una vieja camioneta que habían conseguido prestada para cargar sus instrumentos.
-¿Y Tris?- preguntó Leandro.
- Parece que va a demorarse un poco, espérenlo, yo llevaré a Emma a casa.- les contestó.
-¿Te sientes bien Emma? – preguntó Dani.
-Sí, sólo que está un poco cansada  y tanto encierro allí la sofocó un poco, necesita tomar algo de aire. Nos vemos.- les dijo y la arrastró consigo antes de que alguien interviniera.
-Cam, no era necesario…-protestó ella.
-Oh, sí, yo lo necesitaba, después de tanto ruido quiero caminar un rato y un poco de silencio nocturno – dijo él haciéndola sonreír.
-¿Cómo van tus estudios en la Universidad?- preguntó ella cambiando de tema
-Comenzaron muy bien, muchas gracias por preocuparte. Él es un adolescente inmaduro, con las hormonas algo alteradas, lo sabes, ¿verdad? Pero ya crecerá…– dijo sorprendiéndola.
-¿Y tú? Pensé que eras menor que él…
-En edad sí, pero soy más maduro, tú y yo nos parecemos en eso Emma, somos un poco más viejos de lo que aparentamos, y supongo que por eso nos divertiremos mucho menos…
-Eres el baterista de una banda de rock, no está nada mal…-le dijo ella sintiéndose un poco más cómoda, Cameron no era fácil de distraer, así que era mejor charlar sin darle mucha vuelta. Él era serio, sincero y discreto.
-Sí, pero ya sabes, me gusta mantener un halo misterioso. Suelo guardar cierta distancia.
-¿El cantante principal es el peor, verdad? – preguntó ella  con un deje extraño en la voz.
-Sí, pero si le damos tiempo mejorará…Le debo algo de lealtad, después de todo- contestó con una sonrisa traviesa.
-Cam, ustedes son mi familia, quiero decir, Tristán y yo…
-Tristán y tú van a darme dolor de cabeza, pero está bien, si somos una familia, supongo que seré el tío protector o algo…
-Gracias Cameron. Gracias por ser como eres – le dijo ella y él le pasó un brazo por los hombros en forma protectora mientras siguieron caminando.

3 comentarios:

  1. Me ha encantado, hermoso como siempre querida Nata! Esperando más y gracias por el capítulo :)

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  2. Tris, tris... esas hormonas, algo me dice que seguirá siendo un mujeriego y Emma sufrirá, por lo menos los tiene a todos de familia y al protector de Cam, buen cap sis!

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  3. Que chasco!!!! Como le haces eso... Pero me gusta, me gusta... Quiero mas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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