Crear un mundo con palabras

Si se trata de definir el concepto de ficción, básicamente  significa “creación”, “invención”, eso es lo que hacen los escritores cuando escriben, crean un mundo con palabras…lo convierten en algo “vivo”, con personas y reglas, sólo que algunos lo hacen con mejores resultados que otros…

También creo que hay géneros que  permiten mayor libertad para esa creación, al menos me parece que pasa en los libros de fantasía épica y la ciencia ficción aunque la novela romántica no se queda atrás.

Hay muchos que han logrado que sus mundos tengan nombre propios, reglas e incluso idiomas. ¿Traen pasaporte? …

Esta vez me desviaré un poquito de la literatura romántica, aunque no tanto, también hablaré de ella…

No sé si crear mundos es tan difícil, lo difícil es hacerlos verosímiles, hacer que sean creíbles para quienes los leen…eso ya es palabras mayores. Y a mí como lectora de fantasía me gusta explorar esos mundos y me fascina esa capacidad  de demiurgos que tienen algunos autores.Son pequeños dioses  que enriquecen nuestra fantasía.

El primero que debo mencionar por su asombrosa complejidad, porque es quien inició  el camino es el Señor Tolkien con sus “Señor de los Anillos”, siempre lo admiré porque no sólo creó una historia inmortal de la lucha entre el bien y el mal, creó razas, sociedades e incluso un idioma ( sí, creo el idioma elfico , con una gramática propia, aunque no lo crean), claro que era un filólogo, podía hacerlo. Pero la Tierra Media no existía antes de él…

Si pensamos en algo más moderno tenemos a la escritora de Harry Potter, también ella creó un mundo con reglas propias, con Muggles , plataformas de trenes que llevan a lugares mágicos, una escuela única, la famosa Hogwarts,golosinas con gustos y formas extrañas, e incluso creó un deporte con escobas voladoras …el famoso Quidditch.

Tenemos a otra autora ( una de mis favoritas) , llamada Ursula Le Guin…escribe novelas de fantasías y creó un mundo increíble…mi querido Terramar, pero también escribió libros de ciencia ficción que le permitieron crear complejas sociedades con el fin de  reflexionar sobre la nuestra.

Hace poco leí “Lágrimas en la lluvia” de Rosa Montero, una muy buena novela de ciencia ficción, y en algún lugar leí que ella comentó que tuvo la necesidad de escribir esa historia como para crearse un mundo donde pudiera ir cada vez que lo necesitara ( no son las palabras exactas, pero sí el contenido) Me encantó la idea, creo que es lo que hacen los escritores cuando inventan mundos tan complejos, tan autónomos, crean un lugar distinto para ellos mismos.Y por suerte nos permiten visitarlos….

Si hablamos de romántica hay varios casos, y en general se trata de las sagas. Escribí de Lynn Kurland ayer, bueno , ella ha creado su propio mundo medieval…

También tenemos a Lysa Kleypas con su saga de “Las floreros”, son una extensa familia que nos va llevando de la mano por el mundo delicioso que creó su autora.

Y otra grandiosa creadora de mundos es Julia Quinn con su saga de los Bridgerton, nos mete en el mundo Victoriana por medio de una compleja red de relaciones e historias de amor, de una no menos extensa y encantadora familia.

Cada libro en sí es un mundo creado, pero pocos logran que una vez que los terminemos de leer ese mundo y sus habitantes  persistan en nosotros.  Eso sólo lo hace un buen escritor.

Tengo la sensación de que está estrechamente ligado a las sagas o series de libros porque permite desarrollar minuciosamente un mundo, crearlo en detalles, hacer que  podamos “respirarlo”, pero no lo sé con seguridad, como siempre tiene algo de misterioso.

Le doy las gracias a esos magos que me llevan de paseo cada tanto a Avonlea y sus Tejados Verdes, a la Tierra Media, a Artane, a la Inglaterra Victoriana, , A Terramar y a  tantos otros queridos lugares….